Este jueves, en una extensa sesión, el cuerpo de ediles rechazó la Cuenta de Inversión del ejercicio 2019. “La cuenta de inversión 2019, no estaba en condiciones de ser aprobada. Tenía importantes defectos reflejados por la falta de información precisa, consistente y no integrada. Así también, desajustes entre lo ejecutado y lo presupuestado tal como se evidenció, entre otras cosas, con el crecimiento en la incorporación de personal, más allá de lo que le permitía el presupuesto acordado. Se contemplaba autorización por 1992 cargos y se llegó a un pico de 2360 en noviembre de 2019, es decir, más de 300 cargos que no estaban considerados en el presupuesto”, explicó el concejal Lautaro Ojeda.
La Cuenta de Inversión es el instrumento con el cual el Poder Ejecutivo municipal rinde cuentas ante el Concejo Deliberante y el Tribunal de Cuentas sobre lo actuado en la inversión de los recursos de la Ciudad asignado por la ordenanza del Presupuesto anual.
“También, causó problemática en el traspaso de gestión, el no tener una información sólida, el problema de fin de año para el pago de deudas, sueldo y salario anual complementario. Sobre la última parte del año ingresa un aporte provincial de 245 millones que le permite hacer frente a algunas cuestiones, entre ellas, el paro de transporte”.
El informe -con más de 1300 fojas- fue rechazado, según Ojeda, con “ánimo constructivo para que todas las fuerzas políticas trabajemos arduamente para mejorar los sistemas”.
Al respecto, concluyó: “Tenemos que generar confianza en los ciudadanos, tiene que haber sistemas fiables para que cuando el contribuyente paga una tasa o servicio, sepa que eso ingresa, que es transparente y que después lo va a ver reflejado en su cotidianidad, en el barrio, con mejoras”.
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